viernes, julio 16, 2010

El Hombre de la Ciudad sin Cielo

Y mientras caía
El hombre
De la ciudad sin cielo
Pudo comprender al fin
Que su vida
Era una mosca
Atrapada
Encerrada
En su propio bolsillo
Rodeada
De negras
Arañas operantes
Cuyas redes oscuras
Atrapan
Todos sus sueños
Y cayo