jueves, enero 22, 2009

Ciudad en llamas (sinopsis)

En una ciudad abandonada y asechada por misteriosos incendios nocturnos, criaturas inmortales recorren las sombras hasta que el cielo señale el apresurado nacimiento del amanecer. Karmina es una criatura de doscientos años atrapada en el cuerpo longevo de una joven de veinte, atormentada por el horror de su especie, no desea cometer más asesinatos para alimentarse de humanos y sustentar su vida perpetua. En los días de sombra, Karmina se escapa de su hogar, una casa abandonada a las afueras de la ciudad la cual comparte con sus hermanas de sangre y cómplices homicidas, para circular por las calles conquistadas por los mortales. Refugiada en las bibliotecas, Karmina se nutre con los textos y clásicos de las instalaciones de la universidad instalada en la localidad; es el único lugar lo suficientemente solitario y oscuro para estar segura.

Por otro lado, Joseph Pollidori es un profesor de literatura de la universidad. Obsesionado con la mitología oscura y la bibliografía de terror, se encuentra a punto de perder su trabajo por enseñar sus extravagantes gustos a sus estudiantes. Joseph cree fervientemente que los incendios de la ciudad son causados por vampiros que no pudieron refugiarse antes del amanecer y fueron consumidos en llamas por la luz del sol.

En una tarde lluviosa Joseph se dirige hacia ala biblioteca a devolver algunos tomos cuando observa en un rincón oscuro unos ojos brillantes entre la oscuridad. Muy extrañado se pregunta cómo alguien puede leer en las sombras, sorpresivamente Karmina surge de ese negro rincón atraída por la peculiaridad del profesor y ambos mantienen una conversación intensa de literatura y misticismo. Karmina se da cuenta de que pronto oscurecerá y que debe encontrarse con su clan de vampiros. Antes de irse, Joseph nota que del cuello de Karmina cuelga un símbolo que le es familiar.

Inquieto, el profesor se dirige hacia unos colegas para tratar de descifrar el símbolo. Descubren que se trata del escudo de un clan de vampiros. Investigando entre sus estudiantes, Joseph se entera de un club nocturno llamado The Pit que, según los rumores, es un lugar de encuentro para los no-muertos. Pero resulta más que eso: un lugar de alimentación de los inmortales gerenciado por Richard, el padre del clan. Joseph se disfraza de gótico y se dirige al club con la esperanza de encontrarse con Karmina quien se encuentra bailando con mortales al ritmo de una música estridente. Joseph se da cuenta que se ha enamorado de un vampiro. Karmina, al ver a Joseph presente en ese peligroso lugar, lo saca inmediatamente de ahí y recorren la ciudad bajo un cielo estrellado.

Joseph pierde la oportunidad de averiguar si Karmina es un vampiro real ya que ella huye rápidamente de su lado antes de que amanezca. Al llegar a su guarida, Karmina es sorprendida por su padre quien la saca violentamente de su ataúd para advertirle la peligrosidad de los humanos y para prohibirle ver a Joseph de nuevo. Ella se resiste y Richard la encierra en un féretro encadenado como castigo.

Joseph, recorre la ciudad todas las noches y frecuenta The Pit con la ilusión de volver a ver a Karmina. Al no encontrarla contrata a un grupo de estudiantes para que encuentren la guarida de vampiros. Pero una de las hermanas de Karmina, Emilie, le dice a Joseph que le han prohibido a su hermana verlo y que esos estudiantes son cazadores de vampiros, quienes no buscan los nidos de vampiros para ayudar al profesor, sino paraexterminarlos.



Emilie lleva a Joseph a su guarida para que se lleve a Karmina, pero son descubiertos por Richard quien impide que se lleven a su hija. Repentinamente llegan los cazadores a la casa abandonada con la intención de eliminar a todos los vampiros escondidos en ella. Librando una batalla con los mortales Richard es atrapado y sacado a la luz del día; mientras arde en llamas le permite y suplica a Joseph que se lleve a Karmina para salvarla. Mientras los demás vampiros tratan de deshacerse de los cazadores Joseph saca a Karmina de su prisión y le ofrece escaparse con él; pero ella decide ayudar a su familia.

Los infames cazadores parecen estar a punto de acabar con los vampiros cuando, sin advertirlo, comienza a caer la noche- El clan inmortal gana más fuerza mientras se empapan de oscuridad, ápidamente logran acabar con los cazadores entre las sombras nocturnas. Durante la lucha, Joseph resulta mortalmente herido, mientras se desangra bajo la luz de la luna se despide de Karmina, quien, sumergida en lágrimas, decide morder su cuello y trasformarlo en vampiro.
Tras la muerte de Richard la familia se ha separado, Karmina decide unir el clan y tomar su liderazgo junto a Joseph.

viernes, enero 09, 2009

Texto arreglado

Esta es mi versión arreglada de "Bitàcora", la cual entregué para una asignación para la universidad... no me fue nada mal: obtuve 19 Pts. de 20.

Bitácora del capitán

Desde la lejanía de una galaxia, en un planeta con una atmósfera casi habitable, dos especimenes del tipo Ophistolé megalomorfe, practican un ritual de comunicación extrasensorial mientras consumen Ruidcud -brebaje de color pardo que disipa vapor.
La criatura de menor talla, designada como Extrick, estudia gotas de Grolucks -un curioso líquido transparente- adheridas a una superficie traslúcida y sólida que los cobija del incierto clima. Mientras tanto, Hirboreón, la segunda criatura más grande en contextura, parece vigilar el entorno.
La peculiaridad del ecosistema en el que habitan rompe con la armonía de la desolación del ambiente que los rodea. La extraña construcción que utilizan como hospedaje posee el destello de una advertencia en su planta superior que deletrea “Cafetería”.
Una traducción preliminar del extraño lenguaje ha concluido en la siguiente transcripción:
- ¿De dónde viene las estrellas, Mariano? –Modula Extrick.
- Las de Hollywood, de la cirugía plástica; y las del cielo, no sé… no me gusta especular hasta donde no llega mi imaginación. –Gruñe Hirboreón.
- ¿Por qué no? ¿Se te hace muy complicado?
- No, es muy lejos.
- ¿Y si se llegara a caer una? Estaría lo suficientemente cerca como para especular.
- Tómate el café que se te va a enfriar. Y no hay nada peor que un café helado.
- ¿Por qué?
- Porque son como las oportunidades que no aprovechaste. Te lo tienes que tomar caliente… recalentado, ya no es lo mismo.
- Mariano, yo soy una estrella caída. Como soy del espacio y no de esta tierra a mí me gusta el café frío. –Entona Extrick en diferente pronunciación.
- Está lloviendo a cántaros, “Estrellita”, tómatelo rápido o te puedes enfermar.
- Cómo me gusta cuando me cuidas. Te quiero.
- Cállate ya.-Susurra Hirboreón mientras hunde su mirada penosa en su regazo.

Mientras las partículas de Grolucks siguen arrojándose desde la bruma grisácea en la atmósfera, ambos especimenes parecen guardar silencio en cuanto practican un duelo de miradas. Aún no se ha descifrado el significado de este rito.
Sin aviso, Extrick estira horizontalmente los bordes de su cavidad para la alimentación dejando mostrar sus dientes al exterior, a la vez, Hirboreón consume un sorbo de Ruidcud como manera de esconder su rostro que se ha tornado algo rojizo.
Posteriormente Hirboreón hace enredar uno de sus apéndices superiores entre los Cansags -largas extensiones de células anímicas nacientes del cuero cabelludo- de Extrick; el cual, después de unos instantes, se aproxima a su par y lo rodea con ambas extremidades principales. Hirboreón responde apoyando su encéfalo sobre el cráneo de su compañero.
Extraño comportamiento.

jueves, enero 08, 2009

La metamorfosis de Luna

Hoy mi amiga Luna, de la Universidad, me enseñó un pequeño cuento de su autoría en el que "intenta" (sus palabras; no mías) un monólogo interior... aunque más bien parece un texto catártico, me gustó mucho... MUCHO más que "La Metamorfosis" de Kafka...

Mi metamorfosis

Sentía que no estaba sola, de hecho, me
encontraba entre una inmensa multitud de cientos o miles de seres semejantes a
mí; en realidad éramos una gran familia que comenzaba a formarse. Nos hallábamos
sobre una fuerte superficie, tan fuerte que era capaz de proporcionarnos todo lo
que necesitamos para poder vivir.

Esta fuerte superficie marrón nos
permitía posar sobre ella el tiempo que fuese necesario para luego salir y
exhibirnos en el mundo y no sólo eso, como si fuera poco, esta planta huésped
nos proporciona sus tallos y hojas tiernas; a cambio de nada y justo ahora ya
somos orugas que crecemos velozmente ceñidas a un inmenso árbol.


que el mundo exterior es a veces muy cruel y que hay que buscar la manera para
sobrevivir en él; por eso ahora me encuentro dentro de un capullo. En este
acogedor pimpollo mis hermanas y yo estamos tan bien que no saldremos ni a comer
hasta que seamos unas hermosas crisálidas.

Ya ha pasado el tiempo y
mi apariencia es la deseada, soy una crisálida que se encuentra en la corteza
del mismo árbol donde comencé a desarrollarme, han trascurrido los días y junto
a ellos he vivido mi metamorfosis.

Ya faltan poco tiempo, siento
que puedo moverme y comienzo a romper la envoltura que por tanto tiempo me ha
separado del exterior. Cinco minutos… y nada; diez minutos y aún falta. ¡Qué
desespero!, ya ansío conocer el mundo y fue justo en ese momento que la
envoltura se abrió.

Comencé a salir de la oscura crisálida que por
tanto tiempo me acogió; con desconfío primero saqué mi cuerpo y poco a poco
fueron saliendo mis alas y patas, hasta que al final pude conseguir la victoria.
Abrí los ojos al mundo y volé con pasión; ahora soy una hermosa mariposa que
dejó de ser oruga.